
La falta de rampas en las escuelas públicas y cómo afecta a los alumnos
¿Es la educación accesible para todos en la ciudad de Buenos Aires? ¿Qué sucede cuando los obstáculos físicos se interponen en el camino de la igualdad educativa? ¿Cuál es el impacto de esta falta de accesibilidad en los estudiantes, las familias y la sociedad en general? En esta investigación, nos sumergimos en la problemática de las escuelas públicas sin rampas en Buenos Aires y buscamos respuestas a estos interrogantes, destacando la urgente necesidad de medidas correctivas para garantizar la igualdad de acceso a la educación.
En los últimos años, cada vez más personas comenzaron a denunciar la falta de infraestructura en las escuelas públicas de la Ciudad de Buenos Aires.
Esta problemática llegó a su punto crítico recientemente en las PASO 2023, donde impactó de lleno en personas con discapacidades.
Según datos proporcionados por Acceso Ya, la organización no gubernamental, realizó un relevamiento de 783 instituciones educativas con el objetivo de conocer su nivel de accesibilidad. Esto nos demostró que el 95% de las escuelas privadas y el 75% de las públicas no cumplían con las condiciones mínimas de accesibilidad. Este fue el motivo por el cual la organización inició un proceso de amparo colectivo contra el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, con el propósito de exigir el cumplimiento de las leyes de accesibilidad en todas las escuelas de la ciudad.
El objetivo de Acceso Ya era lograr que se cumpliera la obligación que tiene el Estado, que requiere por un lado que todo el trayecto de ingreso, como la circulación dentro de las escuelas resulte accesible y autónomo para las personas con discapacidad, según lo dispone la normativa vigente Conf. Ley N 22.431, modificada por Ley N 24.314 y decreto reglamentario 914/97.
Según un informe del Registro Nacional de Personas con Discapacidad (ANDIS), hay un total de 152.566 personas con movilidad reducida. Conforme a la Resolución 311/16 del Consejo Federal de Educación que refiere a la educación inclusiva, obliga a todas las provincias a garantizar un sistema de educación inclusivo en el que las personas con discapacidad puedan estudiar en escuelas comunes con los apoyos que sean necesarios para que aprendan en igualdad de condiciones, así como recibir la certificación de sus estudios en todos los niveles.
La falta de registros gubernamentales para el año 2023 en relación con esta problemática resalta la limitada disponibilidad de información oficial. Este equipo buscó comunicarse con el Ministerio de Educación a través de diversos medios para averiguar qué medidas está tomando el Ministerio para incrementar la construcción de nuevas rampas para personas discapacitadas frente a estos casos, pero no obtuvo respuesta hasta la publicación de esta nota.
El último registro actual es de AccesoYA en respuesta a las calificaciones negativas sobre la falta de accesibilidad, que desarrolló un mapa en el año 2022, el cual abarca escuelas, locales gastronómicos, comercios, boliches, bancos, salud e instituciones accesibles.
Esto facilita a familias y estudiantes identificar escuelas que garanticen el pleno ejercicio de derechos, diferenciando las que tienen accesibilidad básica y total. Del total de 533 escuelas públicas accesibles, 356 cuentan con accesibilidad básica y 177 con accesibilidad total.

Previamente, los últimos datos oficiales del gobierno fueron entre los años 2012 - 2015, donde el Departamento de Gestión de Infraestructura Educativa (DGIES) llevó a cabo mejoras significativas en la accesibilidad de las instituciones educativas de la Ciudad de Buenos Aires. Se construyeron 392 rampas y se adaptaron 137 rampas existentes. Estos esfuerzos resultaron en la mejora de 400 escuelas con accesibilidad básica y 283 escuelas con accesibilidad total. Esto marcó un avance significativo desde las cifras de 2011, cuando solo 8 escuelas eran completamente accesibles.
Sin embargo, entre 2015 - 2019, los avances fueron más limitados. Solo se mejoraron 16 escuelas con accesibilidad total y 200 con accesibilidad básica. En 2019, un relevamiento determinó que, de un total de 883 escuelas estatales, 600 contaban con condiciones de accesibilidad básicas, y de estas, 299 tenían accesibilidad total.
Las escuelas públicas de nuestro país están distribuidas en diversas comunas y barrios, pero lamentablemente, son pocas las que ofrecen accesibilidad a las personas con movilidad reducida. Este problema se hizo más evidente tras la realización del "rallydad", que tiene como objetivo visibilizar las barreras físicas con las que cuenta nuestra ciudad.
Durante el recorrido que se realizó por los diferentes barrios, se evidenció claramente este problema.
Aunque hay ciertos avances queda en evidencia que, el Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, todavía debe trabajar más en la accesibilidad de las escuelas públicas ya que estos últimos cambios que se hicieron no son suficientes para abordar adecuadamente la problemática de accesibilidad. Es fundamental abordar la falta de infraestructura con urgencia, no sólo para garantizar la igualdad de oportunidades, sino también para aliviar la carga adicional que recae sobre aquellos que ya enfrentan desafíos considerables en su búsqueda de inclusión y participación en la sociedad.